Donde te encuentras actualmente es gracias a tu sistema de creencias. Tus hábitos, rutinas y creencias son los responsables de tus resultados actuales, ya sean malos, buenos o extraordinarios. No conozco a ningún gerente de ventas, vendedor o empresario que no quiera ser mejor, sin embargo, en mi experiencia, más de la mitad de las personas no elevan su nivel de creencias, es decir, el estándar de lo que creen, viven, observan y como consecuencia ejecutan.

Todas las personas aprendemos a hacer el trabajo que nos encomiendan, pero el 80% de las personas no mejoran, de hecho, llega el momento donde alcanzan la incompetencia por no renovarse e incrementar sus habilidades. El gran Jim Rohn lo decía claramente “Invierte tu tiempo en aprender tu trabajo y te ganarás la vida, pero invierte tu tiempo en desarrollar tus habilidades personales y ganarás una fortuna”.

Es importante renovar nuestras rutinas a mejores rutinas, recuerden que no todas funcionan. Nuestro sistema de creencias se basa en lo que creemos que somos, esto como consecuencia dicta nuestra forma de pensar y nuestra actitud. La actitud nos mueve, nos hace tomar decisiones que nos beneficia o perjudica. Al tomar decisiones que nos lleve a la acción, es donde se produce visiblemente una consecuencia, es decir el Resultado (positivo o negativo). Si tenemos vendedores que no venden lo que deben de vender, es que su sistema de creencias es muy limitado. No conozco vendedores exitosos que tengan bajo nivel de creencias, todos son muy ambiciosos, y no solo quieren más, buscan más.

Como puedes observar, los buenos profesionales de ventas primero tienen un alto nivel de creencias, con grandes estándares que los impulsan a tener grandes resultados. Se preparan antes de una cita, estudian a su prospecto, llenan sus agendas con acciones productivas, no se permiten invertir tiempo en acciones que no les agregan valor, y como resultado tienen ingresos superiores a los demás vendedores.

3 consejos para mejorar tu sistema de creencias e incrementar tus ventas:

1. No veas a tu cliente o prospecto como una simple transacción. Tu estándar de ejecución debería ser siempre entregar valor (no solo producto). Este es un concepto general lo sé, sin embargo, pocos gerentes y vendedores lo hacen, ya que depende de la preparación previa a las reuniones. Invierte 20 minutos a prepárate para crear valor, haz esto y automáticamente elevarás la percepción que el cliente tendrá de ti.
2. Consigue un mentor o un coach. Sabemos lo que queremos (regularmente), sin embargo, no tenemos idea de cómo empezar. Un mentor te ayuda a orientarte para ser mejor, pero no busques a cualquiera, busca personas exitosas y expertas en el tema de ventas. 1-2 horas cada 15 días te pueden ayudar a detonar mejores resultados.
3. Toma cursos, conferencias, talleres, seminarios. No puedes mejorar simplemente con quererlo, debes invertir energía, tiempo en hacerlo. Los resultados serán increíbles. Conozco vendedores que, gracias a nuestros entrenamientos, elevan sus ingresos de 20,000 pesos a 100,000 pesos al mes. Invertir en ti es tu mejor garantía.

Te deseo lo mejor.

- Hanniel Maldonado